No te saco de mi cabeza

Si tengo que elegir entre dos cosas que odio en este mundo, una seria la rutina, esa que siempre de una forma u otra nos dice lo que debemos hacer. Pero, sin duda, lo que más odio, es a ti. Tu orgullo y tu rencor. Tus ganas y a la vez desganas, tu chulería. Esa forma de andar o simplemente de mirar. Pero, si nos ponemos "tiquismiquis" lo que más odio es tu forma de mirar, esa mirada, que como bien repito cada dos por tres, me mata. Me matan las ganas y también me mata el saber que no soy lo suficiente para ti, aunque, si me pongo a pensarlo y a darle vueltas a toda esta historia, no sé bien que clase de historias te gustan; no sé si prefieres una la cual sea todo risas, felicidad y sonrisas falsas que poco a poco demuestra  lo difícil que es seguir fingiendo. O tal vez, prefieras una historia diferente, sin nombre, sin planes, solo sorpresas, que visto lo visto, cada vez tardan más en llegar.